Descripción:
El desarrollo psicomotor se puede considerar como la evolución de las capacidades para realizar una serie de movimientos corporales y acciones, así como la representación mental y consciente de los mismos. En este desarrollo hay unos componentes madurativos, relacionados con el calendario de maduración cerebral y unos componentes relacionales que tienen que ver con el hecho de que a través de su movimiento y de sus acciones el sujeto entra en contacto con personas y objetos con las que se relaciona de manera constructiva.
La meta del desarrollo psicomotor es el control y dominio del propio cuerpo hasta ser capaz de sacar de el, todas las posibilidades de acción y expresión que a cada uno le sean posibles, e implica un componente externo praxico (la acción) y un componente interno o simbólico (la representación del cuerpo y sus posibilidades de acción). El desarrollo psicomotor hace que el niño, con sus potencialidades genéticas que van madurando y la intervención de facilitadores ambientales, vayan construyendo su propia identidad.