En la actualidad, la sociedad se halla inmiscuida dentro de un escenario en el que la globalización tiene una posición imperante al interior del currículo y por ende de las instituciones educativas, dando nacimiento a nuevas líneas para la formación estudiantil, una de ellas, se refiere al dominio del inglés como segunda lengua, la cual aparece como una asignatura relevante en los planes de estudio a nivel licenciatura. Sin embargo, a pesar de los múltiples esfuerzos dedicados a que los estudiantes logren dominar la lengua inglesa; dicho objetivo no se ha logrado consolidar. Es por ello que cobra sentido dirigir la mirada hacia el análisis de los procesos de enseñanza y aprendizaje del idioma.