Introducción: El cáncer durante el embarazo, aunque raro, plantea desafíos significativos tanto para el diagnóstico como para el tratamiento. La necesidad de estudios de imagen, como radiografías, tomografías computarizadas (TAC), y resonancias magnéticas (RM), es crucial para la estadificación y el manejo adecua-do de la enfermedad. Sin embargo, el uso de radiación ionizante durante la gestación ha sido un tema de controversia debido a los posibles riesgos teratogénicos para el feto. Este estudio se centra en evaluar los efectos perinatales de la exposición a radiación ionizante en mujeres embarazadas con cáncer ginecológico o de mama atendidas en la clínica CREHER del Hospital Regional de Alta Especialidad Ixtapaluca. Objetivos: El objetivo principal es determinar si la exposición prenatal a la radiación ionizante, derivada de estudios de imagen realizados para el diagnóstico y estadificación del cáncer, se asocia con efectos adversos significativos en los recién nacidos. Además, se analiza la correlación entre la dosis total de radiación acumulada y los resultados perinatales, como el peso, la talla y el puntaje de Apgar al nacer. Metodología: Se realizó un estudio descriptivo, observacional y retrospectivo que incluyó a 12 pacientes embarazadas con cáncer de mama o ginecológico entre 2018 y 2023 en la clínica CREHER. Se recopilaron datos sobre el tipo de cáncer, el número de estudios de imagen realizados, las dosis de radiación acumula-das, y los resultados perinatales de los recién nacidos. Las correlaciones se analizaron mediante coeficientes de Pearson y Spearman para identificar asociaciones entre la exposición a radiación y los resultados perinatales. Resultados: Los hallazgos muestran que las dosis de radiación ionizante recibidas durante el embarazo estuvieron por debajo del umbral de riesgo clínico (100 mGy). No se encontraron correlaciones significativas entre la dosis de radiación acumulada y los resultados perinatales (peso, talla, y puntaje de Apgar). Los recién nacidos presentaron resultados perinatales normales en su mayoría, aunque se observó una incidencia moderada de restricción del crecimiento intrauterino (RCIU) en algunos casos, atribuible probablemente a factores asociados al cáncer y a los tratamientos recibidos. Además, en un subgrupo que recibió quimioterapia, no se observaron alteraciones fetales significativas. Conclusiones: Este estudio sugiere que la exposición a radiación ionizante, en dosis controladas y administrada bajo supervisión médica, es segura para los fetos de mujeres embarazadas con cáncer. La investigación subraya la importancia de un enfoque multidisciplinario en el manejo del cáncer en el embarazo, que permita la individualización del tratamiento y minimice los riesgos para el feto. Se recomienda el seguimiento de estos casos en futuros estudios con muestras más grandes para validar estos hallazgos y desarrollar guías clínicas que aseguren la seguridad materno-fetal en contextos similares.