Descripción:
Desde la primera descripción en 1735 por Werlhof de una enfermedad hemorrágica como "morbus maculosus hemorrhagicus", el diagnóstico y tratamiento de la PTI ha estado en constante debate. En un principio y hasta
no hace muchos años, la PTI, púrpura trombocitopénica idiopática, se consideraba una enfermedad hemorrágica que ocurría tanto en niños como en adultos y de la que se desconocía su etiopatogenia.
La primera esplenectomía con éxito se llevó a cabo en Praga en 1916, casi 200 años más tarde de su primera descripción, tal y como fue referida por Kasuelson, actitud terapéutica actualmente vigente con un sin fin de
matizaciones en cuanto al momento oportuno para llevarla a cabo. A partir de 1950, la teoría del mecanismo inmunopatogénico de la PTI fue cada vez más convincente y así Harrington en 1951 después de autoadministrarse plasma de un paciente con PTI, desarrolló la enfermedad de forma transitoria.