Descripción:
Introducción: El tratamiento nutricional para pacientes con insuficiencia cardiaca y falla derecha debe asegurar el mejor intercambio gaseoso disminuyendo el nivel sanguíneo de CO2. Por lo que una dieta baja en hidratos de carbono al tener menor cociente respiratorio puede representar una opción para estos pacientes. Objetivo: Determinar si una dieta baja en hidratos de carbono (40%) tiene impacto sobre el estado clínico de los pacientes con insuficiencia cardiaca, a través de una menor producción de CO2, comparada con la dieta estándar con una proporción convencional de hidratos de carbono (50%). Materiales y métodos: Se realizó un ensayo clínico aleatorizado controlado con 39 pacientes, divididos en: grupo control (n=18) y de intervención (n=21) evaluados durante dos meses. Tiempo durante el cual se les realizó bioimpedancia eléctrica, prueba de esfuerzo y exámenes de laboratorio. El análisis de los resultados se hizo con el programa SPSS versión 17.0 utilizando pruebas de t-student y X2 para variables continuas y categóricas según corresponda. Resultados: Al final del seguimiento se encontró mayor pérdida de peso (p= 0.037) en el grupo de intervención, así como mejoría en la saturación de oxígeno en decúbito (p= 0.020) y en la relación de la reactancia con la altura Xc/h (p= 0.028); estas dos últimas variables tuvieron cambio significativo desde la consulta intermedia (p=0.007; p= 0.037, respectivamente). Hubo tendencia a ser estadísticamente significativas las variables de resistencia (p= 0.096) y la saturación de oxígeno sentado (p= 0.076) de los porcentajes de cambio basal-intermedia. En comparación con la dieta estándar, la dieta baja en hidratos de carbono mejoró en mayor proporción la sintomatología (fatiga, disnea e intolerancia en decúbito). No se reportaron cambios en la presión arterial en ningún grupo ni en los datos bioquímicos. Los demás datos obtenidos de la impedancia bioeléctrica mejoraron en el grupo de intervención, sin embargo, no fueron cambios significativos. Conclusión: La dieta baja en hidratos de carbono resultó ser efectiva para reducir el peso, aumentar la saturación arterial de O2 en decúbito, mejorar la clase funcional y la relación Xc/h en los pacientes con insuficiencia cardiaca.