Descripción:
Los pueblos de México han padecido no sólo de problemas ambientales, de explotación o despojo, sino también de ser el objeto con el que se mide el desarrollo de todo el país, señalándolos la mayoría de las veces como comunidades atrasadas y con necesidades de desarrollo. Sin duda en muchos lugares –ciudades y pueblos- del país se requiere tanto de los proyectos de desarrollo, así como de la solución de las necesidades particulares de dichos contextos sociales. Sin embargo, antes -o durante- debemos atender la cuestión de las estrategias que se han utilizado para la atención a dichos problemas y si han sido adecuadas.
La oralidad es sin duda un elemento de suma importancia para la transmisión y preservación de las tradiciones y conocimiento de las diferentes culturas que existen en todo el mundo y estos a su vez forman parte no sólo del patrimonio intangible, sino de los elementos que determinan los modos de vida, usos y costumbres de una región, a partir de los cuales las comunidades interpretan el mundo y los elementos producto de la interacción social de la vida cotidiana.
A causa de esta inquietud por concientizar a los lectores de la investigación sobre el reconocimiento de la permanencia del mundo tradicional en la modernidad y sobre todo de las problemáticas que acarrea el no tener estrategias de comunicación que se basen en las necesidades particulares de información e intercambio de contenidos, dentro de un contexto social específico, como lo es la zona del Totonacapan y en especial la población que habita en el municipio de Zapotitlán de Méndez, Puebla.