El presente estudio aporta la metodología necesaria para determinar y ubicar mineralización de tipo SEDEX del Jurásico inferior en un blanco de exploración específico; obteniéndose un 90 % de precisión, en contraste, con un método tradicional de prospección en un área de 25 km2 y con una precisión menor al 60 %. La sustancial mejoría en la ubicación de blancos de exploración, se logró innovando al aplicar dos variables más, ubicar una región afectada por una estructura de apertura cortical tipo rift que hayan sido depositadas en una secuencia sedimentarias que presentan evidencias de transgresiones marinas. Para ello se realizó una extensa recopilación bibliográfica realizando el análisis estratigráfico, tectónico y geodinámico del área de estudio permitiéndonos determinar de forma preliminar que el ambiente de formación, la mineralogía y zonación de un yacimiento sedimentario, que son factores valiosos que facilitan su prospección, así mismo su localización proporciona un bajo margen de error en su ubicación temporal y geográfica. Estructuralmente se propone analizar los vestigios de la estructura tectónica usada como guía la cual, podría tratarse de un posible Rift antiguo, así como las evidencias transgresivas sucedidas en el Jurásico Inferior. La etapa transgresiva del protojurásico fue encontrada en la Formación Huayacocotla y se cree que este evento fue el que dio pauta a la formación mineral. Al determinar minerales asociados con un yacimiento exhalativo sedimentario se determina una configuración peculiar que ofrece un modelo preliminar del depósito y, por tanto, al explorar y buscar ciertas particularidades geológicas se pueden establecer blancos de exploración muy similares. Finalmente, se pretende establecer con base al contexto geodinámico, estratigráfico y geoquímico, si el área estudiada es altamente prospectiva para depósitos SEDEX de metales base que tienen amplia trascendencia estratégica, porque en la actualidad no se ha realizado este tipo de prospección dirigida en nuestro país. Lo anterior, es interesante porque estudios pioneros como el aquí presentados podrían arrojar datos valiosos sobre la presencia de minerales estratégicos como lo son las tierras raras y los del grupo del platino. Esto último, es notable porque no se ha reportado la presencia de este elemento en yacimientos de este tipo en México.