Las niñas y los niños son sujetos de interés en esta investigación, existe una preocupación en saber, de qué manera y cómo es que se cubren y se cumplen sus derechos y necesidades básicas: educación, alimentación, salud, cuidado y protección1. Estadísticamente en el mundo, hay una población total de 2.200 millones de niñas y niños (UNICEF, 2014), que representan el 36% de la población mundial; todos los años nacen alrededor de 132 millones de niñas y niños alrededor del mundo; 1 de cada 4 niños viven en situación de pobreza extrema; estas niñas y niños pertenecen a familias que tienen ingresos menores de un dólar al día. En los países en desarrollo, 1 de cada 3 niños viven en situación de pobreza y 1 de cada 12 niños o niñas mueren antes de cumplir cinco años (Ídem). México, tiene 39.2 millones de niñas y niños que corresponde a la tercera parte de la población total del país; 2.5 millones de niñas y niños viven en condiciones de precariedad y pobreza extrema, otros 2.5 millones se encuentran trabajando, 7.2 millones no asisten a la escuela y 24.5 millones no cuentan con seguro social o algún tipo de servicio médico; sólo 6.6 millones de niñas y niños viven con la necesidad básica cubierta (Galván, 2016). Podría suponerse que la condición social, el cuidado y la protección de las niñas y los niños son efectos inmediatos de las condiciones laborales y sociales en las que se encuentran sus familias y esto depende del empleo, los ingresos y el acceso a servicios sociales (salud, vivienda, entre otros) que tienen sus padres.