La contribución genética es un factor no modificable para el desarrollo de obesidad, se ha descrito que representa un riesgo del 25-40% en los sujetos con antecedentes heredofamiliares de obesidad. Genes como la leptina (LEP) y el receptor de melanocortina 4 (MC4R) han sido involucrados en la señalización hipotalámica de saciedad, regulando el metabolismo, ritmos neuroendocrinos y el balance energético del organismo. Variaciones en la secuencia de estos genes, pueden modificar la función de la proteína y alterar la señalización de saciedad y de esta manera favorecer la ganancia de peso. Por tal motivo el objetivo general de este trabajo es establecer la asociación de polimorfismos de un solo nucleótido en los genes de LEP, LEPR y MC4R con el estado de nutrición de niños escolares del estado de Hidalgo, México.