Descripción:
Por razones históricas y económicas de índole variada, las sociedades contemporáneas les encargan a sus universidades, la implementación y el cultivo de sistemas de producción de conocimiento o investigación (Garrido, 2016) Dentro de las funciones por la que se caracteriza las instituciones de educación superior se encuentran formación intelectual, moral, profesional y política de las personas implicadas en el quehacer del desarrollo humano integral. El carácter social y público de la educación impone a sus instituciones un rol también social y público: la formación y los conocimientos han de tener un valor social, o sea, de mejoramiento de las condiciones de realización del bienestar colectivo (Díaz, 2012).
En el presente trabajo, se muestra como las instituciones de educación superior se encuentran inmersas en las actividades correspondientes a la generación de conocimiento, así como los mecanismos que utilizan para poder llevar dicha información obtenida a través de patentes, producción científica incluyendo el capital humano formado dentro de las universidades, como son los investigadores y alumnos titulados en los niveles desde pregrado a posgrado.