A partir de la epidemia de influenza A H1N1 presentada en el 2009 y 2010 en México, se evidenció que existía un grave problema de automedicación, específicamente con antibióticos; y aun a pesar de la existencia de legislación en materia de prescripción de medicamentos, esta no se cumplía; por lo que fue necesario establecer que los antibióticos solo podrían ser adquiridos con una receta médica, la cual debería cumplir con todos los requisitos establecidos en la normatividad. Todo esto como medida para tratar de controlar el grave y creciente problema sanitario de la resistencia bacteriana. Se realizó un estudio observacional, prospectivo y transversal, en un Centro de Salud Rural 2, el muestreo fue no probabilístico por conveniencia, y la información se recolecto durante un periodo de cuatro meses (enero - abril del 2014). El objetivo del estudio fue evaluar el cumplimiento de la normatividad en materia de elaboración de recetas, para garantizar la observancia de las disposiciones legales en función de los requisitos estipulados en la legislación mexicana vigente para la prescripción de antibióticos y diseñar un programa de capacitación específico dirigido al personal médico.