Descripción:
La acumulación de carbono orgánico en el suelo es un proceso importante para mitigar los efectos del cambio climático, el suelo además de ser un sumidero es un reservorio de carbono estabilizado. El objetivo de este trabajo fue determinar el carbono orgánico como un indicador de la calidad del suelo en un ecosistema forestal por efecto de cambio de uso, mediante un estudio de caso a través de la evaluación de las propiedades físicas y químicas. El estudio de caso se realizó en la localidad de San Mateo Acaxochitlán, Hidalgo, México. Se eligieron ocho áreas de estudio, dos por cada uso de suelo (SR16: suelo reforestado con Pinus patula con 16 años de edad; SR9: suelo reforestado con Pinus patula con 9 años de edad; SVN: suelo con vegetación natural con Quercus spp. y SA: suelo agrícola). En cada área se definieron dos sitios de muestreo, en primer lugar, se colecto la hojarasca y mor del horizonte orgánico, enseguida se tomaron las muestras simples de suelo a diferentes profundidades: desde 0 a 60 cm con las cuales se formaron muestras compuestas. Los suelos fueron caracterizados mediante sus propiedades físicas y químicas, utilizando los métodos establecidos. Mediante el análisis multivariado se determinaron las correlaciones existentes entre las propiedades encontrando las relaciones causa/efecto entre ellas. Se observó que no todas las propiedades del suelo muestran diferencias significativas a través del tiempo en un período de siete años. Los parámetros que presentaron variaciones fueron: porosidad total, densidad real, pH potencial, acidez intercambiable, nitrógeno total, K+ y Ca2+. Se encontró que el suelo con mayor capacidad de almacenamiento de carbono orgánico fue el suelo reforestado con Pinus patula 9 años con 21.80 ton CO ha-1.