El uso y abuso de sustancias adictivas, constituye un complejo fenómeno que tiene consecuencias adversas en la salud individual, en la integración familiar y en el desarrollo y la estabilidad social. Aunque en la actualidad (2008) toda la sociedad está expuesta a las drogas, hay grupos más vulnerables que otros a sufrir consecuencias negativas de su uso, como los niños y jóvenes, quienes pueden truncar su posibilidad de desarrollo personal y realizar proyectos positivos de vida. La presencia y el consumo de sustancias psicotrópicas, no es algo nuevo en ninguna sociedad, por el contrario, su existencia está documentada en la historia de la mayoría de las culturas, con variaciones en los tipos de drogas, los patrones de uso, sus funciones individuales, sociales y las respuestas, que las sociedades han ido desarrollando a través del tiempo. Las sustancias psicoactivas eran usadas en la antigüedad en la época de la conquista, dentro de las prácticas sociales integradas a la medicina, la religión y lo ceremonial.