Se estudió el material perteneciente a geómidos encontrado en el municipio de Santiago Yolomécatl, en el estado de Oaxaca. Se describieron e identificaron taxonómicamente los restos fósiles, encontrando que en la muestra había organismos pertenecientes a dos especies, la ya descrita Gregorymys veloxikua, y la aquí erigida Gregorymys mixtecorum. Ambas representan los registros más sureños del género. La nueva especie G. mixtecorum posee las características básicas del género, pero se diferencia del resto de las especies por la presencia de uno o dos anterostílidos en el p4, y una combinación de caracteres única como ser la tercera especie con mayor tamaño, solo por detrás de G. veloxikua y G. tavenneri. Se realizaron dos análisis filogenéticos, uno solamente con las especies del género, en el que se buscaba conocer las relaciones al interior de este, y un segundo que incluyó especies de los géneros hermanos para tratar de recuperar las relaciones dentro de la subfamilia Entoptychinae. En el primer análisis se ubicó a la nueva especie como taxón hermano de G. veloxikua, perteneciente a la misma localidad fosilífera, y ambas como clado hermano de G. formosus, que es la especie tipo del género. En el segundo análisis, se reconoció una estrecha relación entre los géneros Gregorymys y Entoptychus, conexión que había sido declarada con anterioridad por otros autores con base en las similitudes morfológicas. También se recuperó la cercanía filogenética entre G. mixtecorum, G. veloxikua y G. formosus. En ninguno de los dos análisis realizados las especies oaxaqueñas resultaron como las más plesiomórficas, a pesar de ser de las más antiguas. Se recopiló la información de distribución geográfica de 27 especies de entoptychines para utilizarla en análisis biogeográficos, de los cuales se realizaron tres en total: de trazos, de parsimonia de endemismos y de reconstrucción de áreas ancestrales. En los tres análisis las áreas que resultan ser complejas son el centro de las Grandes Planicies y la del Pacífico Noroeste. Estos datos apuntan a un centro de diversificación a partir de esas áreas, sin embargo, las edades permiten plantear la evolución sincrónica de distintas especies de entoptychines en varias partes de Norteamérica durante el Oligoceno.