Descripción:
Los complejos organometálicos han sido ampliamente estudiados debido a la gran diversidad estructural que presentan, a la reactividad química que muestran y a la diferente naturaleza de enlaces químicos presentes en ellos. Por definición, un compuesto organometálico está conformado por un fragmento orgánico el cual se une a través de uno o varios átomos de carbono a un átomo metálico. Así, los compuestos organometálicos pueden contener en su estructura metales alcalinos (Grupo I), alcalinotérreos (Grupo II), de transición, elementos del bloque p (por ejemplo, algunos no metales como el fósforo y metaloides tales como B, Si y As) e incluso combinaciones de varios metales. Los compuestos organometálicos tienen como principal característica la formación de enlaces entre átomos metálicos y de carbono que pueden ser de distintos órdenes, es decir que pueden conectarse a través de enlaces sencillos, dobles o triples.