Descripción:
La biología de células madre se ha convertido en un importante campo para comprender la regeneración tisular y su aplicación en la medicina regenerativa. En casi todos los vertebrados se observa un patrón en la formación de órganos en común; esta formación se inicia como resultado de las interacciones a nivel tisular que se produce entre dos tejidos. Hay animales donde se observa está regeneración y así mismo de un de un organismo hay regiones anatómicas donde puede haber regeneración, como es el caso de los roedores donde en ciertas zonas, como son los incisivos puede presentarse regeneración dental. En este caso, los incisivos y molares muestran diferentes patrones de erupción: en los molares una vez que concluye el proceso de erupción y la formación total de las raíces estos no presentan regeneración mientras que los incisivos presentan un proceso de regeneración continua a lo largo de toda su vida cuando hay un desgaste de estos dientes. Sin embargo, en el humano no hay ningún tipo de regeneración dental. Si supiéramos cómo se puede regenerar los dientes de los roedores es posible que sepamos cómo regenerarlos en el ser humano. Las investigaciones han demostrado que en cultivos celulares han logrado regenerar dientes de roedores, pero no se han hecho ensayos in vivo. Por lo que se realizó un proyecto de investigación de tipo experimental cuyo objetivo fue evaluar el trasplante de células madre de gérmenes dentales en fracturas inducidas de molares e incisivos de ratones CD-1. Para ello se obtuvieron células madre de gérmenes dentales de crías de ratón de cinco días de nacidos determinadas mediante la técnica inmunohistoquímica identificando el marcador CD-166 de células madre obtenidas directamente de las mandíbulas y trasplantándolas en molares e incisivos de ratones cepa CD-1 adultos, los cuales fueron monitoreados hasta su completo desarrollo. Se realizaron mediciones de los tamaños, forma, color y bordes de los dientes incisivos y molares a lo largo de 15 días, tanto a los que recibieron el trasplante de células madre como a los que no, que solo actuaron como receptores. Posteriormente, en el primer mes se observó aceptación de estas células en la región de los molares y mejoró la rapidez de crecimiento de los incisivos y a los tres meses se obtuvo como resultado el crecimiento de una masa amorfa, pero si con una similitud histológica. Se encontró presencia de odontoblastos y ameloblastos bien diferenciados significando reproducción activa de los dientes. Con lo que se puede concluir que el trasplante de células madre de germen dental
permite la regeneración de molares e incisivos y da pauta como alternativa de tratamiento para personas que han perdido un órgano dental. Sin embargo, aún falta más por investigar estudiando variables que permiten controlar el desarrollo de estos dientes mejorando su forma. Esto sigue abriendo la puerta para continuar con las investigaciones sobre odontología regenerativa de dientes.