En esta investigación, propongo la viabilidad y el carácter progresista de la descriminalización del consumo de drogas en México. Pues mientras el Estado mexicano implementa políticas públicas para prevenir y abordar los problemas sociales relacionados con el consumo de drogas, principalmente a través del derecho penal, paradójicamente, estos problemas sociales no disminuyen, por el contrario, aumentan en el país. Con la aplicación del derecho penal como principal política pública antidrogas en México, se ha evidenciado la reproducción de múltiples problemas sociales y jurídicos, como son la criminalización indiscriminada del consumidor de drogas, la vulneración del derecho a la salud publica tanto de los consumidores, como de la sociedad en general y el potenciar el crecimiento de la violencia ocasionada por el crimen organizado; en consecuencia, la penalización del consumo de drogas en México en lugar de proteger el derecho a la salud de la sociedad en general, lo vulnera, al ser más lesivas las consecuencias de la penalización comparados con los problemas sociales derivados del propio consumo. En tal virtud, la propuesta concreta es la aplicación de la política pública de la descriminalización del consumo de drogas en México, pues se propone la utilización de medios jurídicos alternos al derecho penal, los cuales son menos lesivos, como la aplicación del derecho administrativo. Mediante la descriminalización del consumo de drogas como política pública se evitará la criminalización de los consumidores, los cuales no deben ser tratados como criminales, pues ellos presentan un problema de salud, como consecuencia de sus adicciones; además se fortalece la prevención, la educación y la deshabituación de quienes tienen la necesidad del consumo de drogas, con lo cual se logra la disminución considerable de los problemas sociales derivados del consumo de drogas.