Desde la experiencia de mujeres privadas de su libertad, esta investigación se enfoca al estudio de los roles sociales tradicionales y estereotipos de género que se ponen en funcionamiento en el Centro de Reinserción Social de Pachuca, Hidalgo. El trabajo penitenciario fue el objeto de estudio. La metodología utilizada fue cualitativa (entrevistas a profundidad y observación participante). Entre sus hallazgos destacan los distintos tipos de trabajo que en este Cereso se realizan: el de “talacha”, el formal, para solventar “la cuota” y el “invisible”. Se constata, así mismo, que en este tipo de instituciones, las relaciones género entre hombres y mujeres son jerárquicas, en las cuales ellas ocupan una posición subordinada. La construcción social de las diferencias sexuales es la tradicional: hombres proveedores y mujeres cuidadoras (al servicio de los “otros”), pese a que ellas asumen el rol de proveedoras de sus familias, específicamente, de sus hijos, al aislarse y/o ser abandonadas, la mayoría de ellas paulatinamente, por sus esposos o parejas sexuales.