La pandemia provocó numerosas consecuencias negativas tanto físicas como psicológicas en materia de salud. En el caso de la población de adultos jóvenes el aislamiento social impuesto afectó el estilo de vida, teniendo consecuencias en el estado mental y nutricional. El presente estudio da a conocer los cambios de conducta alimentaria provocados entornos a la pandemia. Por lo tanto, se tiene como objetivo evaluar el impacto causado por la pandemia de COVID-19, en el cambio de conductas alimentarias en adultos jóvenes de la zona metropolitana de Pachuca, Hidalgo. La investigación fue de carácter epidemiológica transversal. Se realizó en la zona metropolitana de Pachuca, Hidalgo (Epazoyucan, Mineral del monte, Pachuca de Soto, Mineral de la Reforma, San Agustín Tlaxiaca, Zapotlán de Juárez, Zempoala). La edad de la población de estudio se encontró entre los 18 y 29 años; se eligió un muestreo no probabilístico tipo bola de nieve, debido a las medidas de distanciamiento social ocasionadas por la pandemia de COVID-19. El 68% de los encuestados pertenecieron al sexo femenino, más de la mitad provenía de Pachuca de Soto y de Mineral de la Reforma. El 57.53% se clasificó con un peso normal y el 38.52% con sobrepeso u obesidad. En cuanto las escalas emocionales, la mayor parte no padeció depresión, ansiedad o estrés (47.41, 41.98 y 48.64%, respectivamente). El 27.64% tenía distorsión y el 12.84% de los adultos jóvenes reportó riesgo a desarrollar un trastorno de la conducta alimentaria. De acuerdo con las conductas alimentarias, el 64.69% mostró comportamientos relacionados con la reducción de ingesta, siendo en su mayoría de subingesta emocional y selectividad frente a los alimentos. La presencia de emociones negativas, así como el sexo femenino, son factores de riesgo para la aparición de un trastorno de la conducta alimentaria.