Descripción:
El enorme auge en la producción y consumo de aparatos eléctricos y electrónicos (AEE’s) debidos a nuevas y mejores tecnologías, genera equipos con una corta vida útil, provocando una tasa de crecimiento anual del 3% al 5% de residuos de este tipo, siendo considerado el flujo de residuos de mayor crecimiento a nivel mundial. Dando pie a un problema de carácter ambiental y de seguridad para la salud humana debido a la toxicidad de algunos de sus componentes. A pesar de su potencial impacto negativo, los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE’s) contienen una gran cantidad de metales nobles y no nobles, considerando a las placas de circuitos impresos (PCI’s) que los conforman, como una fuente secundaria viable de estos recursos. Fundamentado en que cada PCI presenta de 0.1 a 0.5 gramos de oro esto dependiendo del equipo de procedencia y su época, frente a una extracción de 1 a 5 gramos de oro por tonelada de mineral, es decir, las fuentes secundarias de este metal pueden ser comercialmente más atractivas.